La protección de las casas fábrica del Raval empezó hace un año con la suspensión de licencias de obra sobre 38 inmuebles y un estudio para conocer el valor patrimonial de un total de 64 piezas industriales del barrio.
Este proceso culmina ahora con la catalogación de 26 de estas casas fábrica como elementos industriales de interés patrimonial, aprobada en el Consejo Plenario. Nueve de los inmuebles se han catalogado como nivel B, bien cultural de interés local, por su importancia e integridad histórico-artística, y los otros diecisiete, como nivel C, por las modificaciones sobre el diseño original.
En todos estos casos se establece que se tienen que conservar los espacios diáfanos originales y se evita que se pueda aumentar el volumen del edificio. Tampoco se admite la construcción de nueva vivienda en los interiores de manzana.
El resto de edificios estudiados se quedan con el nivel D, y será necesario un estudio específico para cada uno de los casos si existe la intención de derribarlos o transformarlos de manera sustancial.
Patrimonio emblemático del Raval
Las casas fábrica proliferaron especialmente en el Raval a partir de finales del siglo XVIII y son una muestra del carácter del barrio de la época y su desarrollo, con la primera industrialización en la ciudad todavía dentro de las murallas.
El tipo de edificación consiste en una única pieza donde había la fábrica y la residencia de los trabajadores. Originariamente eran horizontales pero con la implantación de las máquinas de vapor, en el siglo XIX, se empezaron a construir en bloque o fábrica de pisos.
El cambio de usos y la falta de protección y regulación ha hecho que muchas de estas piezas se hayan derribado a causa de actuaciones inmobiliarias.
Las calles del Om, de la Riereta y de Sant Vicenç concentraban originariamente una parte importante de estas casas, así como en los alrededores de las calles de Sant Pau y Nou de la Rambla.
Barcelona protege 26 cases-fábrica del Raval edificadas entre los siglos XVIII i XIX
El Consejo Plenario aprueba definitivamente la protección patrimonial de un conjunto de edificaciones que caracterizan el desarrollo del barrio desde finales del siglo XVIII y buena parte del XIX
Los inmuebles se catalogan como elementos industriales de interés patrimonial de nivel B o C para evitar que se derriben y conservar su tipología de edificación característica que reúne en una sola pieza la fábrica y la residencia
Barcelona blinda el valor patrimonial de un conjunto de 26 casas-fábrica y fábricas construidas en el barrio del Raval, en el distrito Ciutat Vella, desde finales del siglo XVIII y hasta buena parte del siglo XIX. El Consejo Plenario ha aprobado definitivamente, con los votos a favor de todos los grupos y la abstención del PP, una Modificación del Plan Especial de Protección de Patrimonio arquitectónico Histórico y Artístico de Ciutat Vella que protege los inmuebles como elementos industriales de interés patrimonial mediante la catalogación como nivel B o C.
Las casas fábrica caracterizan el desarrollo del barrio a partir de finales del siglo XVIII. La Barcelona amurallada encontró una buena localización para dar respuesta a la creciente industrialización urbana en unos suelos de Ciutat Vella, y en especial en el Raval, que aún no habían sido ocupados masivamente. El modelo de implantación industrial en el barrio presentaba, además del tipo de fábrica compacta, una tipología de edificación alternativa característica en que, en una misma pieza, estaba la fábrica y la residencia. Muchas de estas piezas no fueron protegidas más allá del nivel genérico de Ciutat Vella como D, y se han ido derribando debido a iniciativas inmobiliarias.
Fàbrica Comas, calle de la Paloma, 15
El consistorio ya dio un primer paso hace un año de cara a proteger estos inmuebles con la suspensión de licencias de obra sobre 38 piezas industriales aún edificadas en este ámbito que corrían el riesgo de ser dañadas. Desde entonces, se hizo un estudio detallado para conocer el valor patrimonial de un total de 64 emplazamientos que incluía, además de las 38 de la suspensión inicial, otras casas-fábrica que ya estaban catalogadas pero que se valoró la su inclusión en el plan para reforzar el nivel de protección atendiendo su origen como tipología industrial.
Del total de elementos estudiados, 7 ya estaban protegidos -6 como B y 1 como C- y ahora se protegen 19 más. Del total de 26, para 9 de ellos se determina el nivel B -Bueno Cultural de Interés Local- que, de acuerdo a la Ley de Patrimonio, tienen un alto grado de significación e importancia y se han conservado con una gran integridad tipológica e histórico-artística. Para los otros 17, se establece una protección de nivel C, que conlleva su preservación aunque pueden haber sido sometidos a transformaciones importantes que modifican su integridad original. Este balance final incluye 2 elementos para los que inicialmente se había propuesto el nivel C y que han pasado a B después de la fase de información pública.
Para los edificios protegidos, el plan evita que se pueda aumentar el volumen edificado y establece que los espacios industriales diáfanos se conservarán. En cuanto a los usos, se condiciona el establecimiento de todos aquellos que puedan ser perjudiciales para la conservación de los valores del edificio protegido. Por tanto, no se acepta la compartimentación en varios locales de oficinas, comerciales, viviendas, etc. Y no se admite vivienda de nueva creación en los edificios protegidos interiores del patio de manzana ni en planta baja si conlleva la alteración de los valores espaciales de las naves.
Ámbito de protección del plan
Aparte, se refuerza el estudio previo para el resto de inmuebles, que en el Raval como en el resto de Ciutat Vella quedan con nivel D, ya que el plan indica que habrá un estudio previo en caso de gran transformación, demolición o rehabilitación que permita encontrar posibles elementos a incorporar en los proyectos, y deja la puerta abierta a su futura protección en caso de que el interés del conjunto así lo pida.
La relación final de casas–fábricas que se protegen con niveles B y C en el Raval es la siguiente:
Las casas-fábrica contaban con una tipología original donde una misma pieza incorporaba la residencia y la fábrica en los cuerpos interiores de la parcela, como una pieza integral. Este modelo sería sustituido por la casa destinadaa la producción, que se acabaría denominando casa fábrica. Mientras que las primeras construidas en el interior delrecinto medieval de la ciudad se creaban a partir de la agrupación de diferentes parcelas, el Raval -con extensos terrenos agrícolas y por urbanitzar- ofrecía a los fabricantes la posibilidad de nuevas parcelaciones adecuados a la demanda de espacios productivos. Así se inició el proceso de implantación industrial en el barrio que continuó hasta mediados del siglo XIX.
Los primeros establecimientos eran construcciones básicamente horizontales o de pabellón. A partir de la implantación de los vapores en el siglo XIX se hizo mayoritaria la construcción de bloque o fábrica de pisos. Muy pronto, el concepto de casa-fábrica comenzó a designar tanto las construcciones que estrictamente obedecían a esta estructura de vivienda en fachada con cuadros productivos interiores como las fábricas de pisos afrontadas en la calle, aunque no dispusieran de viviendas.
Cuando se localizan los emplazamientos originales de estas instalaciones industriales, se observa un eta y de San Vicente, sobre los que se ubica una parte importante los emplazamientos y que incluso es equidistante del resto de emplazamientos del barrio. También es muy significativa la concentración de fábricas en las huertas de alrededor de San Pablo y la calle Nou de la Rambla, foco de implantación original de estas instalaciones en el Raval.
Plano de 1862 de Miquel Garriga i Roca